.Fin

Que idiota me siento. Que imbécil, que pelotudo, que ingenuo... cualquier persona en el mundo, cualquiera, hasta mi mamá. Todas menos vos.

¿Y ahora que hago?

No puedo evitar sentirme tan pero tan mal. Ya se rompió el cristal que te cubría, ya la rosa que se desojaba lentamente como en la bella y la bestia se marchito, ese cristal se rompió. Ya no sos ideal. No lo quiero decir, pero creo que sos una más ahora.

Me duele tanto pero tanto, hacia mucho tiempo que no me sentía tan vació, tan enojado conmigo mismo. Puse las manos al fuego y me queme. Eras la única, la que me hacia plantearme todo en la vida, me dabas vuelta la cabeza, me hacías sentir que la vida valía la pena ser vivida con tan solo pensar que tarde o temprano estaríamos juntos. ¿Adonde puedo huir si quiero perderme de mi mismo?.

No hiciste absolutamente nada malo, pero nada. Pero no puedo evitar sentir que ese simple acto haga caer el castillo que había construido para vos, mi princesa de cuento de hadas. Que ingenuidad pensar que la gente es como uno cree y no como verdaderamente es. Lastima me da sentir lo que siento, nostalgia por el sentimiento que se va, y melancolía por mi.

Lentamente se cae, las paredes que te encerraban en mi cabeza se desmoronan. Te vas a poder escapar. Ya no vas a ser mas prisionera de nadie, ni de mi. Pensarte va a ser inevitable, pero así como llega el otoño cada año y se va, como la gente se levanta y va a trabajar, la rutina vas a ser vos. Mi rutina en mi cabeza gritaba tu nombre. Eras la razón de mis días, la esperanza de lo sucesivo una vez mas en mi vida. El terminar con lo trivial y empezar lo eterno. Ya no te puedo mirar y sentir algo menos que angustia. Ya no te puedo mirar. No por ahora.

Porque algo tan común para algunos, puede ser nefasto en mi cabeza y terminar con algo que nunca había empezado realmente. Muchas veces no se sabe lo que se quiere, yo ya lo sabia.

No te quiero ver, no te quiero hablar, solamente quiero pedirte perdón por si te trate mal en estos últimos momentos, pero era tan grande la sensación de agonía que estaba viviendo que no lo podía tolerar. Todavía no puedo. Ya no sos ideal, sos real. Ya sos lo que pensé que no ibas a ser. La gente comparada con vos no era nada.

¿Y ahora que? Ya te llore, no creo que sea lo ultimo que haga, sin duda fue lo primero que sentí. ¿Que esta primero, el pensamiento o la emoción? siempre en mi estabas vos, lo que sentía. Yo te amaba. Siempre te ame. No estaba con vos y te amaba, estaba con vos y te amaba, por momentos me sentí extraño, pensé que nunca iba a terminar; es tan fácil como decirlo, se acabo. Ni vos en mi mente, ni vos en mi vida. Solo vos en el recuerdo. Y lo peor es que siempre fuiste solamente vos.

Que ingenuidad, no hay nada peor que la decepción de uno mismo. Que tragedia sentir que estoy derrapando en mis palabras cuando solamente quiero decir que no puedo mas. Estoy mal y no puedo dejar de pensar en lo estúpido que fui.

Te perdono, pero creería que lo máximo que pueda recibir de vos sea algo que no me podes dar; ¿Entonces que me queda? Quedabas vos, ya no queda nada. Para mi siempre fuiste primero vos, después vos y después? Yo? No! VOS. ¿Ahora que puedo pensar si ya no me queda pensarte?

En quien confiar es la pregunta del millón. ¿Acaso la equivocación no es parte de ser humano? Si lo es, pero vos eras la dueña de la verdad, de mis momentos mas felices. Me hacías feliz. Me hacías.